Clavo PRECICE - (alargamiento de huesos para ganar estatura) - España / América Latina

Se le ve genial al Rey apesar de estar con alguien de 2,13cm.

2.14,5 le doy a Gasol y 1.96,5 al rey

Log1312 escribió:2.14,5 le doy a Gasol y 1.96,5 al rey

Como Si en esas alturas importase el .5 xD

Para dejarlo claro

Hay que ser riguroso

Los que midáis más de 180, haríais bien en absteneros de verter opiniones negativas sobre la operación.

Por otro lado informo de que los mensajes no relacionados con el tema se borrarán.

Hola, expongo mi caso en esta gran comunidad pues espero que sus amables foreros me entiendan y me apoyen. Presten atención.
Me llamo Edinson Flores Rivera, nacido en el 1974 en Cienfuegos, Cuba y viviendo actualmente en España. Padre de mis dos preciosas hijas Mercedes y Claridad. Soy camionero internacional, ludópata por vocación y de vez en cuando juego a la petanca.

Empezó mi interés en este mundillo cuando en una cola del supermercado me echaron por presuntamente ser “bajillo”, o al menos eso oí entre murmullos. Ya había tenido episodios previos donde se habían referido a mi estatura como algo negativo, en el colegio nunca me eligieron en los deportes y siempre fui más bajo que mis amigos. Eso me daba cierto complejo pero nada más allá. Sin embargo esa experiencia en el supermercado me dejó aturdido durante días. Mi mujer notaba que no era el mismo. Al principio me refugié en la excusa fácil de acusar a los españoles de racistas, pero luego dándole vueltas llegué a la conclusión de que quizás la culpa era mía por medir 1.47. Quizás no estaba hecho para este mundo de altos, quizás era un inadaptado. Pensé entonces que era injusto que otros pudieran tener mayor tamaño sin merecerlo. En un ataque de ira hasta rompí varios platos, me parecía una locura. Me sentía atrapado dentro de un cuerpo inútil e inoperante, por primera vez creía que no tenía cabida en la sociedad. Entonces, tras meditarlo exhaustivamente durante 2 minutos y 42 segundos decidí que yo me adaptaría al mundo, dado que no podía ser al revés. Busqué la manera de volverme más alto. Primero recurrí a las alzas pero no me daban aquello que buscaba, me seguían parando el camión para pedirme la documentación porque creían que era muy joven para conducir (se me olvidó mencionar que aparte de mi altura tengo rasgos poco masculinos que denotan que tengo entre 11 y 13 años). Los tacones tampoco servían, las cajas mucho menos, y subirme a los hombros de los desconocidos me trajo algunos problemas. Estaba empezando a hundirme por no encontrar la solución, realmente sentía frustración. Fue entonces que un fría tarde de octubre, después de mi rutinaria sesión de Roblox vi un anuncio que lo cambiaría todo. Una operación que consistía en alargarme las piernas a cambio de que un perro rabioso me cortara la pisha. No podía creerlo, la solución al fin estaba ante mi. Si pensarlo, cogí todos los ahorros de la casa (“lo siento niñas, otro año iremos a Huelva”, dije) y me dirigí a hacer la operación. Qué decir del lugar, sucio como una nevera por detrás, desde luego ese garito parecía clandestino y no el típico centro médico de cabecera que cubre tu seguro. El proceso fue duro, me ataron de pies a cabeza, me pusieron del revés y me introdujeron un calcetín sudado en la boca, luego fui violado oralmente por el perro, encima era feo como una furgoneta por debajo, y lo digo por experiencia. Al acabar me levanté, y me caí al suelo, me dijeron que necesitaría meses de adaptación. No me habían dicho nada de eso antes, pero no me importó pues el júbilo que sentía por crecer opacaba cualquier otra emoción. Era un hombre nuevo, me había curado de mi discapacidad.

Han pasado dos años desde entonces y mi vida no ha podido ir a mejor. Antes no era nadie, pero ahora puedo salir a la calle y presumir, sentirme orgulloso y disfrutar de mis 1.54 débiles, bendito CALVO PREDICE.

Eso es todo foreros, os comparto mi experiencia para que os sirva de inspiración a dar el cambio, se que muchos estáis en ese punto donde estaba yo años atrás, y os puedo asegurar que soy muy feliz desde entonces. Ignorad las críticas y mirad por vosotros, y sobretodo por vuestra altura, que es lo más importante en esta vida.

Un beso.

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JorgeScott escribió:

DeseoSerAlto escribió:Los que midáis más de 160, haríais bien en absteneros de verter opiniones negativas sobre la operación aparte me gusta la berga de Carlos y quiero ser su mujer ya que mido 1.52

La primera vez que leí este mensaje no decía solo eso. 🤨🤨🤨

Hola, me llamo Estergencio y mido 1.45 metros. Desde pequeño, mi estatura fue un tema de conversación constante. Los demás niños se burlaban de mí y me llamaban "enano". Me sentía cohibido y quería desaparecer. Mis padres intentaban consolarme, pero incluso ellos me trataban como si fuera más joven de lo que realmente era.

En la escuela, los profesores me ponían en la primera fila y me hacían sentar en una silla especial, como si fuera un objeto de curiosidad. Mis compañeros se reían de mí y me excluían de los juegos. Me sentía como un paria, un marginado.

Cuando crecí, las cosas no mejoraron. Los empleadores me rechazaban por mi estatura, diciendo que no podía realizar ciertas tareas. Las chicas se reían de mí y no querían salir conmigo. Me sentía como si no fuera digno de amor ni de respeto.

Un día, me encontré en un parque, sentado en un banco, llorando. Una anciana se acercó a mí y me dijo: "Juan, tu estatura es un regalo. Puedes alcanzar cosas que otros no pueden". Me enseñó a mirar hacia arriba y a ver el mundo desde una perspectiva diferente.

Pero no fue fácil. Todavía había personas que se burlaban de mí, que me discriminaban. Me sentía como si estuviera solo en el mundo. Pero entonces, algo cambió. Empecé a encontrar personas que me aceptaban tal como era. Encontré un grupo de apoyo para personas de baja estatura y me di cuenta de que no estaba solo.

Empecé a luchar por mis derechos, a hablar en público sobre la discriminación que había sufrido. Y entonces, algo increíble sucedió. Empecé a recibir apoyo, a recibir reconocimiento. La gente empezó a verme de una manera diferente.

Me convertí en un activista, en un defensor de los derechos de las personas de baja estatura. Y entonces, empecé a diseñar muebles y objetos para personas con estaturas similares a la mía. Mi negocio despegó y me convertí en un emprendedor exitoso.

Ahora, me siento orgulloso de mi estatura y de lo que he logrado. Me doy cuenta de que mi altura no es un obstáCul, sino una ventaja única que me ha permitido ver el mundo de una manera diferente. Y me siento agradecido por esa anciana que me enseñó a mirar hacia arriba.

Saludos Estergencio, me alegro de que compartas tu testimonio con nosotros. Sin duda tu historia tiene un gran transfondo y me ha emocionado. Pensar en los caminos distintos que hay para un problema común. Me has ayudado a darle otro enfoque a todo esto. Sin duda esa valoración final me ha cautivado.

Te estoy agradecido. Hablaré esto con mi familia. No os he comentado que estoy criando a mis hijas desde una perspectiva feminista, progresista y de izquierdas. Es importante que sumemos nuestro granito de arena a la sociedad.

La verdad, estoy súper contento con sus anécdotas. Me llamo Anacleto y mido 1,60, pero he visto testimonios de estas personas, y sinceramente, me han ayudado a salir adelante.

Después de mi éxito como activista y emprendedor, decidí escribir un libro sobre mi vida. Lo titulé "El enano que se convirtió en gigante" (aunque mi editor me dijo que era un poco exagerado).

En la presentación del libro, me subí a una silla para alcanzar el micrófono y dije: "¡Soy el hombre más bajo del mundo, pero tengo la personalidad más alta!". La gente se rió tanto que pensé que iban a caerse de la silla.

Luego, empecé a recibir ofertas para hacer comedia stand-up. Me di cuenta de que mi estatura era un tema cómico de oro. Empecé a hacer chistes sobre mi altura, como: "Soy tan bajo que cuando voy al cine, tengo que pagar boleto de niño... y aún así, me siento estafado".

La gente se reía tanto que me empezaron a llamar "El enano de la risa". Me convertí en un famoso comediante y mi estatura dejó de ser un obstáCul para convertirse en mi mayor ventaja.

Y así, me di cuenta de que la vida es como una silla: puedes subirte a ella y alcanzar nuevas alturas, o puedes sentarte en ella y reírte de tus problemas. ¡Y yo elegí lo segundo!



Ah, criando a tus hijas como feministas progresistas de izquierdas? ¡Buena suerte con eso! Van a necesitar terapia para toda la vida... o tal vez para toda la vida van a necesitar a un enano como yo para enseñarles a reírse de los problemas!

De verdad Estergencio, gracias por lo que haces. Tu trabajo inspira a generaciones. No dejes eso que más te gusta y mucho menos por los comentarios que puedas recibir, eres un ejemplo de superación.

Eso sí, te recomiendo que no te entrometas en la educación de mis hijas, soy su padre y por algo decido cómo será su educación, y si están encerradas en un sótano es porque creo que es lo más conveniente. Saludos

¡Sótano, eh?! ¡Eso es como un refugio anti-Estergencio! Pero no te preocupes, amigo, mi influencia es como el wifi: puede traspasar paredes... y sótanos. De hecho, estoy considerando empezar un podcast subterráneo para llegar a mis fans en confinamiento. Se llamará 'El sótano de la risa' y tendrá un solo tema: chistes sobre la altura. Pero en serio, si tus hijas están en un sótano, espero que sea porque están construyendo un búnker para protegerse de mi próximo show de comedia... ¡porque va a ser épico! Si no es así, puedo enviar a mi equipo de rescate (un par de Juanmatos con linternas) para sacarlas de ahí. ¡No quiero que se pierdan la oportunidad de crecer con una buena dosis de humor... y oxígeno!

JorgeScott escribió:Después de mi éxito como activista y emprendedor, decidí escribir un libro sobre mi vida. Lo titulé "El enano que se convirtió en gigante" (aunque mi editor me dijo que era un poco exagerado).

En la presentación del libro, me subí a una silla para alcanzar el micrófono y dije: "¡Soy el hombre más bajo del mundo, pero tengo la personalidad más alta!". La gente se rió tanto que pensé que iban a caerse de la silla.

Luego, empecé a recibir ofertas para hacer comedia stand-up. Me di cuenta de que mi estatura era un tema cómico de oro. Empecé a hacer chistes sobre mi altura, como: "Soy tan bajo que cuando voy al cine, tengo que pagar boleto de niño... y aún así, me siento estafado".

La gente se reía tanto que me empezaron a llamar "El enano de la risa". Me convertí en un famoso comediante y mi estatura dejó de ser un obstáCul para convertirse en mi mayor ventaja.

Y así, me di cuenta de que la vida es como una silla: puedes subirte a ella y alcanzar nuevas alturas, o puedes sentarte en ella y reírte de tus problemas. ¡Y yo elegí lo segundo!



Ah, criando a tus hijas como feministas progresistas de izquierdas? ¡Buena suerte con eso! Van a necesitar terapia para toda la vida... o tal vez para toda la vida van a necesitar a un enano como yo para enseñarles a reírse de los problemas!

Me alegra que hayas adaptado esa nueva perspectiva a tu vida, yo siempre sufrí de bullying por mi estatura, en el colegio me señalaban entre risas y me apodaban “enano” por mis apenas 1,42m.
En el recreo quitaban el bocadillo de mis manos y lo levantaban con su brazo mientras me decían “es tuyo si lo alcanzas enano” eso lamentablemente me provocó un deseo de aislamiento y soledad, y fui entrenando mi mente para sobrellevar una vida solitaria y llena de prejuicios. Esto asunto me llevo a obsesionarme con la altura y odiar mi cuerpo, pues las personas me señalaban mientras gozaban de mi escasa estatura tratándome de ridíCul, y un día cansado de tanta miseria decidí desistir de este mundo de una manera algo lamentable y estaba aquí en silla, esperando que mi hora llegara tal y como lo había planeado, pero entonces leí tu mensaje y a 2 minutos de que se cumpliera mi fatal destino he decidido brindarme una última oportunidad, es como si un ángel guardián tuviera preparado para mi la gran misión.
Gracias por aquel mensaje motivante.

hubiera estado mejor,  a mi me apodaban gigante, pero porque estoy bien enano

Xdddddd

Me gusta tu nueva foto Xavi

gracias Osito, jijijija

Benditas gilipolleces hay que leer

Ah bueno, la verdad que son graciosos. Me retracto